A primera hora de la mañana he salido de la oficina a comprar agua. Todos los de la ofi vamos al Caprabo, así nos damos un paseo con la escusa de que esta mas barata que en la maquina. He mirado la cartera al salir, y para que nos vamos a engañar, habían telarañas.
Un euro a aparecido en mi cartera, y me he dispuesto a comprar. Pasando por el quiosco de la ONCE me he dicho a mi mismo:
-Y porque leches no despilfarras tu dinero y compras un rasca de esos?
Y eso he echo. Me he comprado un Tres Seis, que vale 1€ y te pueden llegar a tocar 10mil. Digo te pueden, porque lo mas cerca que estarás nunca del premio será lo que te contó el tio Federiano en una comida familiar, que al vecino de un amigo del camping le tocó una vez.
Te toca premio si te salen tres cifras iguales. De salirte, ganas la cifra que haya salido por triplicado.
Teniendo el boleto en mi mano lo he rascado con entusiasmo. Vamos, no es que lo haya rascado con entusiasmo, no no, lo he rascado con la uña. Y que desagradable que es rascar el cartón ese con la uña... se te ponen los pelos de punta de la grima que da. Es peor que rascar con las uñas en una pizarra de colegio.
A lo que iba.
Rasco uno. Bien, un cinco. Tiro a por los dos siguientes. Uno y cinco. Bien bien, Dani que hoy triumfas... Y si si, en el último me ha vuelto a salir un 5. Ouuuu Yeaaa!!!
Rapidamente lo he cobrado en el quiosco. Obviamente y por la ley del derrochador, he cobrado 3€ y los otros 2 los he vuelto a invertir en dos rascas, que por cierto, no me han tocado.
Con los 3€ que he ganado me he comprado la botella de Agua y unos M & M's, y encima me ha sobrado para el café del almuerzo.
Tendrian que ser todos los dias tan maravillosos como el de hoy.
Buenas noches a todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario